Educación intercultural en la primera infancia

Desde hace muchos años, las familias de comunidad indígenas entre otras se van a las ciudades para cambiar de estilo de vida, empleo, educación para los niños entre otros. Por ejemplo: Shayana a sus cuatro días cuando llegaba a su primer día de clase vestía un traje típico de su comunidad, después de ser observada por sus compañeros esta se volcó a jugar con ellos.

Las ciudades ofrecen más y mejores servicios como electricidad, alcantarillado, agua potable, educación y salud que en zonas rurales, además de mejores empleos como el de cerrajeros profesional, que es un servicio que es solicitado constantemente en las ciudades.

En casi todos los países de América Latina, un niño indígena que vive en zona urbana tiene un 40% de probabilidad de culminar la educación primaria más que un niño indígena viviendo en zona rural.

En las zonas urbanas, las familias indígenas tienen un menor acceso a los servicios básicos que la población no indígena, en América Latina los niños no indígenas con edades comprendidas entre los 6 y 11 años registran mayor asistencia escolar que los niños indígenas.

Inclusión a través de idiomas ancestrales

La disparidad que experimenta este segmento de la población se exacerba en el ámbito cultural, mientras mas aislados estén de los servicios básicos, más carecen de medios para integral su legado cultural al resto de la sociedad, en lo que se refiere al ámbito de la educación formal.

La mayoría de los materiales impartidos en las instituciones escolares, no se adaptan a la realidad cultural y étnica de las poblaciones que migran a las ciudades, no incluyen la enseñanza de idiomas ancestrales, que suele ser la lengua materna de niños indígenas.

La falta de reconocimiento de la diversidad étnica y cultural, en las aulas en particular niega la riqueza de las raíces ancestrales, preservar la lengua materna de las poblaciones indígenas no evita su extinción y con esta parte de los saberse ancestrales, brindándole ventajas para el desarrollo cognitivo.

Estudios indican que los niños bilingües, tienen mayor capacidad para prestar atención, mejor memoria, conciencia metalingüística, habilidades de representación abstracta y simbólica, los niños bilingües son creativos y tienen capacidad para crear soluciones diferentes e innovadoras frente a un problema.

Apostar por la interculturalidad

Desde hace muchos años se han implementado sistemas de educación intercultural bilingüe (EIB), en América Latina, estos sistemas se adaptan a las condiciones socioculturales y etnicas de las poblaciones indígenas, existen en zonas rurales.

Más de 17 países han implementado el sistema de EIB, o se encuentran en proceso, el uso de la lengua indígena en dicho modelo cambia de país en país. Por ejemplo, en Ecuador existe el Modelo de Sistema de Educación Intercultural Bilingüe (MOSEIB), utiliza como lengua de enseñanza la lengua materna de la nacionalidad respectiva y el español como idioma de relación intercultural.

En el caso de Guatemala se usa de forma parcial las lenguas indígenas y únicamente durante los primeros meses de educación básica, todavía queda mucho por aprender, mejorar y fortalecer. Uno de los grandes desafíos para lograr que los niños indígenas no pierdan su idioma ni cultura es creándoos modelos como la EIB que incluyan al grupo predominante de la población.